"Libertad solo hay una. Está en las canciones", Anónimo,
Por la mañana temprano en la rotonda de Bonny junto al Capitán Pedales. En la puerta de Vargas se unen los amigos electrificados que vienen lanzados desde la capital alacantona. Pepe toma las riendas de la locura y así enfilamos, pasado el puente sobre el Monnegre, las sendas y pistas que suben dirección Busot por la Sierra de Bonalba. Con la lengua fuera a piñón la subida infernal, menos mal que Moltó me espera una y otra vez, de otra forma todavía estaría dando vueltas por la zona😆Una vez en el pueblo, recompuestos, sigue la fiesta, ahora en busca del Restaurante 5 Hermanos, donde el asunto se complica y de qué manera... Así las cosas, Pepe nos vende que hay una forma de subir por sendas no muy agresiva, donde apenas hay que caminar un par de tramos. Le creemos y ahí que vamos.La jugada está en un cruce, donde a derechas hay una senda muy rota y vertical. La tomamos y a patita la subimos, y arriba, de nuevo montados, la senda acaba abriéndose y se sube fácil a un cruce. A izquierdas vamos a buscar la senda clásica de bajada, pero ya bastante arriba, habiendo evitado unos cuantos paredones de infarto.
Acabamos saliendo al parking de Canelobre, que luce a tope de coches (es sábado...) Algún arreglo de discos de frenos atacados por piedrolos, la foto de familia, y los eléctricos que se tiran por sendas de vuelta a la capi, y el Capitán Pedales y un servidor que se van de aventura sin rumbo fijo.
Hemos subido a un ritmo endiablado tras los eléctricos a modo de lanzadera y ahora toca recuperar un poco el aliento. Igual las cuestas son de aúpa hasta ganar el Racó de Seva. A partir de aquí las pendientes siguen siendo de normal muy odiosas, y la pista deja paso a senderos en muchos casos impracticables para la BTT.
Así toca armarse de paciencia y disfrutar de los espléndidos paisajes del Cabeçó en las tramas donde sí o sí hay que patear. Más arriba se acaba saliendo de nuevo a pista y, si bien las pendientes son bien fuertes, se puede ir montado, lo cuál se agradece. De esta guisa alcanzamos el ansiado Collado Ganyé, o Coll de Gañá-Este emblemático paso entre montañas es un paso que siempre ha estado abierto al paso libre de personas y mercancías, lo que en nuestro país se conoce como "Servidumbre de Paso", caminos del Estado. De todos!!! Sin embargo hace años un señor dueño de muchas tierras, en connivencia con las autoridades locales, lo cerraron e impusieron un Coto de Caza, y con el tiempo montaron unas puertas y unas vallas que ya las quisieran los fascistas de Guantanamo y otras partes espantosas de nuestro pequeño mundo.
Así las cosas, nosotros, bicicleteros intrépidos, nos negamos a admitir esta patética situación y, si bien no visitamos estos lares con la frecuencia que nos gustaría, cuando nos viene en gana no nos cortamos y nos la jugamos, entrando, como delincuentes, en los territorios de Mordorrrrr👽☠️👻👹👺👺
Hemos pasado el portonaco y el cercado y del otro lado, junto al pozo, almorzamos, una costumbre que viene de largo. Tan tranquilos disfrutamos del merecido descanso con las insuperables vistas de la Aitana y demás delante nuestra cuando suena un disparo. Uno. Seco. Están cazando jabalíes. Inconfundible. Aceleramos la degustación algo asustados y en eso que vemos un Jeep en movimiento que viene hacia nosotros. No sabemos si nos han visto, pero nosotros a ellos si. Recogemos rápido y nos ponemos en marcha. Bajamos volados por la pista. Algunos cruces y, algo antes de llegar a la casona donde vive el jefe Mordor con sus perros adiestrados y sus puertas infranqueables, tomamos una pista a izquierdas. Es una trama nueva que no conocemos, preparada sobre mapas, con la idea de ir en busca del GR330 que une Relleu con La Torre de les Maçanes. Vamos en subida por zonas vírgenes a nuestros ojos. Impactados por los paisajes y con un punto de nerviosismo, sabedores de que los cazadores andan cerca y estamos en territorio prohibido. Muchos cruces, pero el track no nos falla y acabamos llegando a...otra puerta enorme con su vallado de locura. La misma mierda que en el Coll de Gañá-. Investigamos a un lado y a otro y justo en la trama a derechas se puede pasar. Estamos salvados!!Del otro lado nos quedarán unos buenos kms arriba y abajo, y de normal arriba, hasta llegar a una collada donde por fin tocamos el deseado GR, también marcado como Camino de Santiago. En dirección a Relleu-, nuestra dirección, toca bajar por pista alquitranada. Así, en una volada nos ponemos en la parte baja del espectacular Barranc de Bortolons, famoso por los abancalamientos que desde tiempos de los árabes han marcado las economías del lugar. Seguimos cayendo hasta cruzar, ya a los pies del pueblo, el río Amadorio. Del otro lado las cuestas de infarto y por fin en la parte alta de Relleu. Sin solución de continuidad enlazamos con la senda que lleva a Sella por lo que conocemos en el mundillo ciclista como el Pequeño Contador. Una zona magnífica con vistas impagables. Por momentos dura y algo peligrosa, y otros de tremendo placer. Se gana una primera collada y luego una segunda, para luego por fin caer, sí o sí a Sella. O no! Porque buscamos un atajo en una bajada muy fuerte que no tiene salida y nos tocará dar media vuelta (la aventura es lo que tiene🤩🥰🥰) Cuando entramos en Sella vamos directos al Bar La Ferrería, sobre la carretera, donde nos hacemos unas tapas y unos vinos y ya puestos unos cafeses jeje. Envalentonados y con la tarde en ciernes, tomamos dirección la Font d'Alcàntera y pasada ésta, en franca subida en busca del Collado de entrada al Valle del Xarquer-, vigilante de Els Castellets de Sella, un lugar mágico.
Las fotos y nos dejamos caer. Un todoterreno nos deja paso y más adelante dejamos la pista alquitranada por un sendero que es un pequeño mirador. Las fotos y, al volver a asfalto, de nuevo el todoterreno. Y al pasar, me fijo que es mi amigo Toni, que tiene un xoko más arriba. Le grito y para. Hace años que no nos vemos y charlamos un buen rato. Fuimos amigos hace muchos, muuuchos años, esos momentos con toda su fuerza que consiguen que el tiempo se pare.
Al tiempo nos despedimos y continuamos camino en franca bajada hasta caer a la carretera que une Orxeta y Finestrat. A izquierdas, para al poco tomar una pista a derechas. Una pista que han alquitranado y que nos lleva por la falda de la Sierra de Cortina hacia el Embalse del Amadorio. Muchas subidas y bajadas y las estupendas vistas de Orxeta más allá del profundo barranco.
Ganado el Pantano tomamos la carreterilla de servicio dirección Aigües. Generalmente en subida, la charreta ayuda a hacer más llevadero el castigo. Así, casi sin darnos cuenta, estamos en Aigües, que sorteamos por su parte baja para salir al Barranc d'Aigües y luego buscar, más abajo, la carretera que lleva a El Campello. Más adelante a derechas nace una pista que lleva a Les Puntes de Gosàlvez- y más allá, pasado Bonalba, al punto de partida.
El atardecer inminente, el sudor y el frío pegados a la piel, y también la sonrisa de oreja a oreja. Esa indescriptible sensación de felicidad tras el trabajo bien hecho. Una vez más hemos golpeado con fuerza. ¡Mucha fuerza!!
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