LAS TIERRAS MEDIAS I
Cerrando el fantástico 2016 a lo grande con mi hermano betetero Jordi, dispuestos a dar cuenta de la primera entrega de las tierras medias, nuevo proyecto consistente en explorar territorios a los que nunca llega nadie, y no porque estén muy lejos, si no porque pasamos de largo, como si no tuviesen valor, nada que ofrecer, paisajes invisibles, olvidados. Son precisamente esas inmensas zonas casi vírgenes las que presentan todos los alicientes que necesitamos para seguir creciendo en este maravilloso mundo de la bici de montaña.
En día invernal, siempre por debajo de los 10º y amenazando lluvia, nos adentramos en inhóspitas sierras a medio camino entre Lorca y las Sierras de María, Espuña y Cazorla, a caballo entre Murcia y Andalucía, tierra de nadie..., tierra media....
A primera hora de la mañana en la pedanía lorquense de Zarcilla de Ramos, donde un simpático barrendero nos pone al tanto de la vida en la zona. Ya en ruta a través de campos helados y lomas yermas, ganaderías de ganado porcino, canteras y más canteras.
Al tiempo encaramos las primeras dificultades y caemos al río Luchena que baja muy crecido, ¡insalvable! Buscando un paso descubrimos surgencias de ¡agua caliente! Echamos el rato y de últimas nos aprestamos a pasar el enorme brazo de agua. Ya al otro lado nos secamos? y comemos algo.
Dejamos atrás los Ojos del Luchena y en fuerte subida por la muy agreste Sierra del Pericay ganamos el Collado de la Carrasca. Impresionantes las vistas al otro lado con el valle del Pantano de Valdeinfierno totalmente anegado. 
Congelados en el fuerte descenso hasta Casa Iglesias y vuelta a subir, esta vez mas tendido, por la cara norte de Sierra Larga. Entramos en Andalucía y el frío sigue siendo el mismo... En el avance caemos en más de una trampa en forma de barrizales imposibles de sortear. Salimos de uno tras otro como buenamente podemos... "el invierno tiene estas cosas", "gajes del oficio", "como si fuese la primera...", la moral intacta, con toda la fuerza seguimos nuestro destino.
A primera hora de la mañana en la pedanía lorquense de Zarcilla de Ramos, donde un simpático barrendero nos pone al tanto de la vida en la zona. Ya en ruta a través de campos helados y lomas yermas, ganaderías de ganado porcino, canteras y más canteras.
Al tiempo encaramos las primeras dificultades y caemos al río Luchena que baja muy crecido, ¡insalvable! Buscando un paso descubrimos surgencias de ¡agua caliente! Echamos el rato y de últimas nos aprestamos a pasar el enorme brazo de agua. Ya al otro lado nos secamos? y comemos algo.
Dejamos atrás los Ojos del Luchena y en fuerte subida por la muy agreste Sierra del Pericay ganamos el Collado de la Carrasca. Impresionantes las vistas al otro lado con el valle del Pantano de Valdeinfierno totalmente anegado. Congelados en el fuerte descenso hasta Casa Iglesias y vuelta a subir, esta vez mas tendido, por la cara norte de Sierra Larga. Entramos en Andalucía y el frío sigue siendo el mismo... En el avance caemos en más de una trampa en forma de barrizales imposibles de sortear. Salimos de uno tras otro como buenamente podemos... "el invierno tiene estas cosas", "gajes del oficio", "como si fuese la primera...", la moral intacta, con toda la fuerza seguimos nuestro destino.
Sumamos ya un buen montón de kms cuando giramos fuerte encarando un nuevo collado. Estamos en la abandonada Casa Forestal Pozo Trigueros, punto más occidental de nuestra travesía, con unas vistas espectaculares de la Sierra de María nevada y el bello pueblo andalúz de Vélez Blanco a sus pies. Por la cara sur de Sierra Larga regresamos rápido en un continuo sube y baja. Ganamos un alto con tremendas vistas de la Sierra del Gigante y otras. "Todo el mundo por descubrir", pensamos...
Toca bajar, y lo hacemos a toda mecha encajonados por la Rambla de los Estepares, llegando al Collado de Carasoles, cruce de caminos, donde tomamos senda tras senda hasta caer de nuevo a Casa Iglesias, donde paramos a almorzar. 
Luego seguimos en bajada por sendas hasta el Pantano de Valdeinfierno. Las fotos de rigor y nuevamente toca subir, el último esfuerzo, para salir de las montañas y encarar los últimos kms de regreso a Zarcilla.
verTRACK/ Zarcilla de Ramos- río Luchena- Sierra Larga- Valdeinfierno
Toca bajar, y lo hacemos a toda mecha encajonados por la Rambla de los Estepares, llegando al Collado de Carasoles, cruce de caminos, donde tomamos senda tras senda hasta caer de nuevo a Casa Iglesias, donde paramos a almorzar. Luego seguimos en bajada por sendas hasta el Pantano de Valdeinfierno. Las fotos de rigor y nuevamente toca subir, el último esfuerzo, para salir de las montañas y encarar los últimos kms de regreso a Zarcilla.
verTRACK/ Zarcilla de Ramos- río Luchena- Sierra Larga- Valdeinfierno
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