Goliardos: en la Edad Media, monjes vagabundos que llevaban una vida irregular y solían componer poesias de tema amoroso, báquico y satírico.
Cisterciense: rama de monjes benedictinos reconocidos en la época medieval como "el camino más seguro al cielo" debido a su estilo de vida austero y estricto.
Carmina Burana: cantata escénica compuesta por Carl Orff entre 1935 y 1936, utilizando como texto una selección de los poemas goliárdicos medievales de principios del s.XIII encontrados en la colección de poemas Carmina Burana. Hablan sobre cómo el destino de las personas está regido por los caprichos de la fortuna. Por lo tanto, ante un futuro tan impredecible, lo más inteligente es disfrutar mientras se pueda.
El último Goliardo
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| Un goliardo otea el horizonte desde la Iglesia/Castell de Mont-ral |
/CARPE DIEM/TEMPUS FUGIT/
A María José, tu mirada, la mía
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| Platja de Tamarit y su Castell al fondo |
Superviviente de un mar en llamas
Náufrago asido a astilla en tierra yerma
Arribo a una playa desierta a la sombra de un castillo hostil, como todos, la noche negra
¡Mil demonios!¡Mal rayo me parta!!, muerto de hambre, de sed, ciego de amor
Esperando que caliente el día
Perro vagamundo
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| Castell d'Altafulla |
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| Riu Gaià |
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.UNO.
'Yo voy arrastrado
Sin timonel nave
Por sombras celestes
Cuál plumas de ave
No me ata la cárcel
Ni me impiden llaves
Buscar nuevas dueñas
Perseguir beldades',
---Carmina Burana
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| Mi burra con el Castell de Tamarit al fondo |
A lomos de mi burra por los caminos y sendas de la Tarraconensis, qué bien hablados latín vulgar. ¡Cuánta riqueza¡ Pueblos como soles y las tierras de labranza, minas de oro. Hasta donde alcanza la vista campos de vides y los olivares. Hasta donde se pierde la vista, las Montañas de Prades.
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| Salomó |
Cierro los ojos, grillos, pájaros, gatos y perros, gallinas, cerdos, mulas y cabras; los gritos de los niños jugando a carreras y los cantos de las mujeres con sus cántaros a la fuente; el dulzor del azahar, los naranjos y los higos.
Las palabras gruesas de los hombres en las tabernas. Algunos establecidos y otros siguiendo su camino. Yo sigo el mío: monje, mendigo, saltimbanqui, músico, ladrón de almas, bufón sin paga.
Uno mis esfuerzos a otros buscavidas, lisonjeros de labia obtusa, goliardos de medio pelo. Uno argelino de acento francés. Otro franco de acento argelino. Llevan burras que parecen cohetes, yo llevo un cohete que parece burro.  |
| Santes Creus |
Remontamos ríos, fuentes de vida; salvamos peligros de todos los colores: lodazales que te engullen, tierras movedizas; picaduras de abejas, alguna reina; las bestias a lo suyo y dicen ¡basta! Y sin embargo ahí vamos. ¡Seguimos! ¡Resistimos!! Sin dolor aparente, sin aparente esfuerzo, la mirada al frente, cabezones.
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| Calçots |
Algunas iglesias palacios señoriales. Y de entre ellas el Monasterio de Santes Creus. Monjes blancos monjes negros, todos ahítos, todos sin mácula, la sonrisa falsa, el corazón helado.
Ya llegamos a Forés en lo alto de la montaña. La brisa ligera las tabernas abiertas. Ya suena la música y corriendo va el vino por nuestras venas. Quién sabe quién calentará mi lecho, quien sabe quien endulzará mis besos.
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| Goliardos disfrutando de la vida... |
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'En amor perezco
Sufro y me atormento
En cruel herida
Fiera y dolorida
Y a mí sanarme
Podría un beso
¡Corazón amante,
Dulce embeleso!',
---Carmina Burana
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| Goliardos a las afueras de Lilla platicando en arameo con un local |
Con las primeras luces tres o cuatro goliardos que apenas se entienden, el latino viene y va. A veces el destino juega estas pasadas. Y como las lentejas, si quieres las tomas, y si no, las dejas.
Sobre las bestias los caminos de las montañas, las más lejanas. Atravesamos valles, de común cerrados, cruzamos colladas, siempre imposibles. En busca de nuevos horizontes vamos, nuevas aventuras, en busca de algo que echar al buche, en busca de tu mirada, la mía.
Llegados a Vallbona de les Monges, los más estirados, en una posada engullimos las prodigiosas Llonganisses de Valls. No suenan canciones en la plaza. No hay asilo en el monasterio para tanto desdichado maleante malnacido. Todos los brazos son pocos para trabajar los campos de los monjes blancos. Otros tampoco dan palo al agua. Esos mejor vienen conmigo.
Al levantar las posaderas seguimos caminos diferentes para volver a vernos en Poblet con su fabuloso monasterio. Orden de Órdenes. Todo el poder. Y tantos tesoros que guarda y tantos moradores ilustres. Y de entre ellos Jaume I, el gran conquistador. Repican las campanas por él y sus compinches. A cada tanto...
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| Tumba de Jaume I, ¡qué personaje! |
A la tarde seguimos caminos diferentes. Vosotros el vuestro y yo el mío. Quién sabe si el destino nos volverá a juntar o seremos canto de un día. Goliardos vagabundos sin talla ni bravío.
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| Demonios disfrazados de goliardos en la muy telúrica comarca de La Conca de Barberà |
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| Monestir de Poblet |
Por las Muntanyes de Prades aso la cacha del cuchillo con fuerza, el bosque denso, el camino estrecho. Mil ojos tuviese, insuficientes para otear los peligros que acechan. Así es la vida un suspiro.  |
| Monestir de Poblet |
Al otro lado de las montañas la bella Prades con sus murallas inexpugnables. Cuando llego a sus puertas la soldadesca ríe y canta. Siento mis posaderas junto a una cerveza en la plaza, las músicas, las sátiras, mesteres de juglaría. Cae la tarde y sobre mi burra cruzo Capafonts y La Canedeta y ya estoy entrando en la altiva Mont-ral, donde me espera posada. Escudella y pollo a la catalana. ¡Que no falte molí-mató!, y todo bien regado por el mejor vino, que ya quisieran los clérigos, los blancos y los negros.
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| Puerta de Prades |
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| Capafonts |
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| Plaza de Prades |
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.TRES.
'Conforto mi destino cantando
Cisne ante una muerte inexorable
Huye de mi rostro inevitable
El color rosáceo, tierno y blando
Temor creciente
Trabajo ingente
Vigor menguante y amenazante
La copiosa y abundante siega
De la muerte me acecha y me espera',
----Carmina Burana
Debajo del puente se duerme bien pero si hay posada y la ventana mira al sur eso es más que bien. Ya en marcha con los aperos, la hogaza de pan, la bota de vino, ¿y el rumbo?, bajar al valle de vuelta al mar.
Tomamos las sendas y caminos de tantos otros que de siempre suben y bajan de las montañas al valle y del valle a las montañas. Ahí vamos los tres en línea a veces viéndonos a veces no. Dicen que la soledad compartida no es soledad, pero no dicen qué es. Por el profundo barranco se precipitan las bestias y nosotros sobre ellas. Ya en La Riba el jolgorio, la algarabía. Tomamos el camino del río Francolí y en Vilaverd encaramos las Cordilleras Costeras. Sufren las bestias, que para eso están. En lo más alto las vistas del Mare Nostrum inmenso, la paz. Y las fértiles tierras del Alt y del Baix Camp, sus caminos empedrados y sus pueblos de pincel.
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| La Riba |
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| Lilla |
Ensoñados, cruzamos mil campos de vides dejados llevar por las bestias que conocen y bien el camino. Otras recuas de mulas que van y vienen con sus cargas y sus gentes. Y en la posada del Pla de Santa María descansamos todos. Un cruce de caminos es la vida, y la diosa Fortuna acaricia el mío.
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| Taberna en El Pla de Santa María |
Más allá volveré a la línea de playa, puede que embarque o puede que no. Otro día vendrá, la misma sed. Quién sabe de qué plato comeré, quien sabe qué sombra me cobijará. Cantaré las viejas canciones a quien quiera escucharlas y seguiré buscando en los corazones, y en tu mirada, la mía.
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'Oh, diosa Fortuna
Como Luna
Eres siempre variable
Siempre creces o decreces
De forma detestable
Ahora dura o procura
En juego inexorable
La riqueza o la pobreza
Cuál hielo insoportable',
. . . . . . . . . . . . . . .
