viernes, 13 de octubre de 2023

BIKEPACKING/ ALACANT #260

 "Sólo en la penumbra los objetos pueden estar quietos; sólo en la penumbra el pensamiento, el amor, puede estar vivo", Catorce palabras para después del capitalismo, Santiago Alba Rico /Dedicado a mi querido Moisés

AL . CANT #260

Maratón en 2 días uniendo partes de los tracks de la IG226 (hecha en sentido contrario) y la IG360, con algunas variaciones al gusto nuestro jeje.

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Uno/ 

Junto a Bikercampello dando pedales desde el amanecer y antes por parajes sorprendentes del sur alicantino con dos paredes de toma pan y moja: la Sierra de Crevillente y el Monte Coto, y pernocta en el Hostal La.Parada, en El Pinós. 

Un hilo de luna en la negra noche y ahí vamos a toda mecha por la partida de La Borratxina y más adelante, en la zona Norte de Sanvi buscando y encontrando el loco sendero que baja por la Rambla de Rambuchar. Con el petate y la nocturnidad no cabe más emoción🔥😬😱 Ya bien abajo pistas y carreteras sin tráfico por la Sierra Mediana y Fontcalent, donde apagamos las luces. Estamos en El Rebolledo y a Santa Ana y a la Sierra de Tabaiá con su campo de golf Font del Llop que nos mete en el castillo árabe de Aspe

Cruzamos el río Vinalopó y entramos en el Parque Natural de Los Algezares, que hoy, día festivo, se encuentra muy concurrido de ciclistas y caminantes. Será un tramo importante de pistas y la aproximación a Aspe, y la bajada y circuito por el río y la zona de yesos...muy interesante. Más allá salimos a pista que nos corta un coche con guarda jurado dentro que nos dice que es propiedad privada. No se pone muy pesado y nos deja pasar. Es curioso que seguimos un track de una carrera ciclista, y tanta gente que igual pasa a diario... El tema de los cotos privados de caza es la leche, y un día como hoy que comienza el periodo de caza y está todo el monte hasta arriba de escopeteros...en fin... Nos ha dejado pasar y al rato una puerta que evitamos por un lado y ya estamos fuera ohjhhh!!! 

La Sierra de Crevillente, un secarral mayúsculo sobre todo en su cara sur, un lugar ignoto!!, y la aproximación al paredón último que da acceso a la cara norte más bestia si.cabe. En una casa de campo nos dan agua fresca (si es que hay gente buena allá donde vamos!!, eso es así!!!😍😜) A partir de aquí, bien bebidos, atacamos el paredón. Serán 3 kms muy duros con tramos que rondan en muchos momentos el 20% y con picos de calor, ahora, en el centro del día, por encima de los 33⁰C. Cuando ganamos el alto respiramos como si nos hubiésemos quitado una losa🥵 

La bajada a Hondón de las Nieves muy rápida, y en su plaza nos sentamos en un indio a comer. Restaurados y de nuevo en marcha ponemos rumbo a La Romana. Tramos rápidos por campos de vides y el estupendo barrio de las Cuevas de San Antón. Pasamos rápido La Romana y del otro lado tomamos una carreterilla que se va muy vertical en busca de una cantera. Al tiempo un desvío a derechas. Estamos en la aproximación al comienzo de la temible subida al Monte Coto. Mucha senda donde hay que pelear y mucho, y tramos también con mucha pendiente y terrenos rotos y pedregosos. Así las cosas y venga arriba hasta por fin enlazar con la pista de acceso. Pasada la cadena tenemos unos 3 kms con 5 o 6 paredones por encima del 20% de desnivel. Muy duro. Mucho. Sorteamos el reto como podemos y por fin nos encaramamos en la parte más alta. ¡La felicidad!! 

Ganado el techo del día, nos queda una bajada vertiginosa por las pedanías de Les Tres Fonts y Les Encebres. Llegados a esta última tomamos el GR, asfaltado, que en unos 5kms nos mete en el centro de El Pinós. 


Dos/ 

Junto a Bikercampello dando pedales desde el amanecer y antes por parajes sorprendentes del sur e interior alicantino con dos paredes de toma pan y moja: la Sierra de Salinas y el Alto de la Sierra de Onil, techo de nuestra travesía. 

Al salir del pueblo de El Pinós una niebla que se puede cortar nos envuelve. Avanzamos con las lucecitas alucinados. Siempre en ligera subida por pistas en general bien sentadas en busca de la umbría de la Sierra de Salinas. Las fotos echan humo mientras vamos despertando y la intensa niebla que le cuesta levantar. 

Ya en la falda de la alargada cordillera el terreno cambia: será un buen tramo muy pedregoso y con continuos sube y bajas. Extremamos las precauciones y así y así el trabado avance hasta por fin salir a la estupenda pista que lleva a Villena por la zona forestal por la falda de la montaña. 
En un cruce junto a la casa forestal nace una carreterilla muy vertical que lleva directa a la cumbre de la Sierra, a los Altos de Rabasa. La ataca Jordi en solitario. Yo, con alguna dolencia en una rodilla, prefiero seguir por la falda. Más adelante equivocaré el camino y de igual me pegaré un buen acelerón para ir a buscar el track y reunirnos de nuevo. 

Ya juntos la rápida bajada a la carretera, que cruzamos para ir a buscar por detrás de una montaña y entre campos infinitos de vides la vía verde del tren chicharra, a medio camino entre Yecla y Villena. Muchos tramos rápidos en la primera parte, para más adelante entrar en continuos bancos de arena que hacen el avance muyyyy penoso. Cuando por fin entramos en la ansiada vía respiramos profundo. Aún nos quedarán un buen puñado de kms para entrar en Villena, donde nos vamos directos a almorzar y ver si en una tienda de bicis arreglan la maltrecha caja de pedalier de la bici de Jordi. Lo primero lo logramos, lo segundo no.... 

Salimos de Villena y hasta Banyeres de Mariola +-25kms a toda mecha por la Vía Verde dándole al pico. La pala la dejamos para la Sierra de Onil, que nos espera impasible con el mazo jeje. Hemos bordeado el bello pueblo y en la Font del Sapo repostamos agua y entramos en la Sierra de Mariola, comienzo del temido puerto. Es una zona muy conocida y eso nos salva. Vamos salvando diferentes momentos, de normal más tendidas las paredes al principio, para ya bien arriba, tras un giro a izquierdas, afrontar la dura ascensión a la cima. Esta última parte tenemos tres buenas paredes, las dos últimas con la pista alquitranada. 

Una vez salvadas giramos a izquierdas nuevamente y comienza un bajadón muy duro, por lo inclinado del terreno y por el pedrerío infame que obliga a tomar muchas precauciones. Diferentes momentos en la bajada y ya bien abajo se sale a asfalto y en una volada nos plantamos en Casa Tápena, junto a Onil. El chiringuito está abierto y nos preparan unos sabrosos bocatas. Tras coger agua de la fuente atacamos una bajada espectacular de sendas por medio de un precioso bosque de pinos. Vamos al limite y más con el buche lleno y el cansancio acumulado. Ya bien abajo, al cruzar la carretera que lleva a Ibi, nos separamos. Jordi toma dirección Alcoi y yo sigo abajo para cerrar el track. 

Tengo la sensación desde este momento y hasta el final que no me cruzo con nadie, ni ciclistas ni coches ni ná de ná.(bueno, solo un cabrero muy mayor con su pequeño rebaño...) Así las cosas voy a lo que puedo por pistas y más pistas en busca de la carretera que une Ibi con Tibi. Una vez en ella ya no dejaré la brea hasta el Aeroclub de Mutxamel, casi siempre en bajada, entrando por la parte alta a Tibi, buscando luego el castillo árabe, el collado de Alcornia que me mete en el Monnegre, su pueblo, y el último tramo siempre en descenso hasta el punto de partida.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Muchas gracias Ángel por tu dedicatoria. Has conseguido arrancar mis lágrimas...
Comparto desde mi cama vuestro disfrute.