BICIOAVENTURA/ Ríos Cabriel y Júcar + La Manchuela

LO INUSUAL

La enorme, infinita Mancha, esconde una subcomarca, La Manchuela, enclavada entre dos grandes ríos, el Cabriel y el Júcar, y dedicada mayoritariamente al cultivo de la vid, que al menos sobre mapa parece lista para ser devorada, reconocida, explorada.

Un viaje inusual en un bus escolar junto a los hermanos de Aquí hay BTTema nos pone cayendo la tarde del último viernes de la primavera del año 21 en el parking del Campamento Juvenil Majocojo.

Despedidos de los 'pequeños escandalosos' ponemos rumbo al pueblo de Casas del Río. Lo paseamos y tomamos la pista que remonta el río Cabriel por su margen derecha. Algunas charqueras y muchos mosquitos.

Alguna foto y más adelante una tachuela nos pone en lo alto de una loma y nos cierra el paso un enorme portón con candado: COTO DE CAZA. La servidumbre de paso por estos lares parece que se las trae al pairo. Vemos que la valla está rota (tantos como nosotros se habrán quedado con cara de idiotas...) Igualmente es muy tarde y decidimos montar el campamento en la pequeña plana para pasar la noche. 

De madrugada nos sorprenderá la lluvia, que apenas cesa en contados momentos hasta el amanecer. Con todo TODO totalmente calado, montamos en las bicis una vez pasadas por bajo de la valla rota, y seguimos nuestro camino. 

Serán dos o tres kms por dentro de la propiedad privada, y del otro lado la puerta está abierta. Siempre junto al río llegamos a Villatoya, cuyo bar está cerrado. Esperamos a que abran y aprovechamos para escampar sacos, esteras, ropas.... 

Desayunados, salimos del pueblo buscando altura por pista abierta, ganando los inmensos llanos de La Manchuela.

Dirección Alborea, y pasado este pueblo encaramos el curso del río Júcar buscando la población de Jorquera. En su último tramo entramos en un barranco cerrado y un muy antiguo camino de herradura nos acabará metiendo en el espectacular pueblo, con el castillo en lo más alto. 

Al fondo, Jorquera

Fortaleza de Jorquera

Tras la visita deshacemos camino hasta el río, que seguimos en descenso hasta la población de Recueja. El bar con espléndida sombra y muy animado, paramos a comer y nuevamente toda la ropa tendida. Los paisajes junto al río son lo más, y luego de comer y hasta la muy turística Alcalá del Júcar, más de lo mismo. 

Jorquera

Alcalá del Júcar

Más adelante visitamos la pequeña población de Tolosa y en breve el camino comienza a ganar altura. Así por kms hasta ganar lo más alto y vuelta a bajar. En un cruce bien señalizado tomamos a derechas al pueblo abandonado de El Molinar. Echamos un vistazo para posible vivac y seguimos en bajada hasta el río siguiendo el muy deteriorado camino que lleva a la abandonada Central Eléctrica de El Molinar. En su último tramo las bicis no de pueden pasar y toca un buen pateo. Ya de vuelta al espectral pueblo decidimos montar el campamento en una plana cerca de la iglesia. 

 Central eléctrica El Molinar, abandonada

Al igual que el día anterior, de madrugada comienza a llover. Rápido levantamos el campamento y nos trasladamos al soportal de la iglesia, donde pasaremos la noche. 

A la mañana toca remontar pista y salimos a la actual Central Eléctrica, y de ahí por asfalto en franca subida a la pedanía de Villa de Ves, con su admirable monasterio Cristo de la Vida, que visitamos. 

Mirador Cristo de la Vida

Amanece en El Molinar

Luego se gana fácil un collado para entrar de nuevo en La Manchuela y enseguida aparece el pueblo de Villa de Ves, en cuyo bar entramos a desayunar. 

Balsa de Ves

Cruzamos el vasto territorio con el viento a la espalda hasta Balsa de Ves, donde cogemos una cordada con buenas vistas al profundo valle del Cabriel. Acabamos cayendo por una vertical pared al Salto del Cabriel, que no llegamos a ver. Ya solo nos queda remontar por asfalto el río hasta el punto de partida en Casas del Río, en cuyo bar damos cuenta del Gazpacho manchego más sabroso de la contorná!!!

Cristo de la Vida

Molino en casas del Río

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Altar de la iglesia de El Molinar, abandonada