SEND/ Serra Segària

SERRA SEGÀRIA

Un exigente paseo para circunvalar la muy desconocida Sierra de Segària en los confines del mundo alacantón. Del primer al último paso, un montón de sorpresas y las vistas en todo momento absolutamente espectaculares, tanto de la Vall del Girona como de la Marjal de Pego. 

Aparcados en el Merendero de Segària junto al Bar L'Ovella Negra entramos en el PR415 que circunvala toda la sierra, y lo hacemos por dentro de una antigua acequia. Muy llamativo el avance tan sencillo para abrir boca, con las vistas de los campos de naranjos y atrás el bellísimo amanecer con las costas de Denia y la imponente mole del Montgó. 

Llegados a un cruce bien marcado, a derechas una fuerte subida para visitar la Cova Bolumini, y nosotros a izquierdas. Al poco dejamos la estupenda acequia y tomamos un sendero que, ahora sí, se empina en busca del Coll del Pas de Benimeli, con sus ancestrales Pous d'Aigua. Viramos a derechas y toca una fuerte subida por zona muy pedregosa pero bien marcada, hasta coronar el Coll del Barranc de Ramón y hasta las Antenas, donde tenemos unas vistas impagables de la Vall del Girona a nuestras espaldas y delante, la cara Norte, con Pego y su espléndido Marjal. Seguimos arriba y pronto nos topamos con el Poblado Íbero, bueno, los restos que de él quedan... Más adelante aparece el Gigante Dormido, como conocen las gentes del lugar la espléndida cresta de la parte más alta de toda la estirada Sierra. Las fotos echan humo y algo más adelante el sendero desciende bruscamente por un paso a la parte Norte de la Sierra. Visitamos las ruinas del Castillo árabe y ahora sí el sendero se precipita entre una vegetación exuberante. Palmitos, hiedras, zarzas, carrascas..., algunos pasos casi desaparecidos en los que hay que ir casi reptando... Una buena paliza el lento avance. Ya en la parte baja acabamos ganando por fin la Font de Català, que aparece ante nosotros con un hilillo de agua que dan ganas de llorar... 

Seguimos camino tras echar algo al buche y ahora en subida, algo más tendida y los pasos más abiertos, siempre a Levante, al mar. Llegados al cruce para coronar la montaña, decidimos seguir por falta de tiempo. Ganamos luego un collado con un nuevo cruce: a izquierdas se va a Penya Roja y rectos la senda se precipita en busca de la Cova Fosca. Siempre con buenas pendientes, el sendero bien marcado y el rumor de los coches por la Autopista a nuestros pies... La Cova Fosca es realmente llamativa, con unas vistas excepcionales de la costa de Denia y del Montgó. Un broche de oro a una circular a la que solo le queda un último tramo bastante enrocado con fuerte pendiente y el corto camino que nos pone en el punto de partida.