SENDA DEL OSO + PUERTO VENTANA
En Bárzana rápidos entramos en la Senda del Oso. Bajo este rimbombante nombre se esconde una antigua vía de tren minero reconvertida en Vía Verde. Una Vía Verde verdisima, eso sí, y que acapara tramos de inigualable belleza. Su forma de estrella de tres puntas esconde rincones sin par: desfiladeros infinitos, el embalse de Valdemurio, un sinfín de túneles, todos con luz, el Parque de la Prehistoria, con recreaciones de la forma de vida de nuestros antepasados y donde se pueden ver animales en semilibertad: bisontes, caballos, vacas, ciervos, gamos...
Siempre en ligero descenso junto al río Quirós, el plato fuerte el Embalse de Valdemurio. Más adelante se sigue dirección Norte y entramos en el vertical y estrechísimo desfiladero Peñas Juntas con un buen puñado de túneles excavados en la roca junto al río Trubia.
Llegados a Proaza echamos un café, cargamos agua y deshacemos Senda hasta Caranga Baxu, donde tomamos a derechas el ramal que remonta el río Teverga. Algunos puentes, los magníficos bosques y así y así hasta llegar al pueblo de Entragu y algo más arriba al de San Martín, muy animado con el mercado callejero y donde reponemos agua.
A la salida de San Martín la senda se empina, con diferentes sube y bajas. Pasamos los pueblecitos de Las Veigas y Riel.lu, y más adelante entramos en el Parque de la Prehistoria. Seguimos a lo nuestro hasta el bellísimo pueblo de San Salvaor, donde charlamos con unos vecinos la mar de simpáticos que nos dan conversación de la buena.
Aquí salimos a asfalto, realizando toda la ascensión al Puerto Ventana en modo carretero. Se trata de un puerto típico asturiano, con unos 16 kms y un desnivel medio que ronda siempre el 9%. Se hace durete jeje. Reseñar el paso por la Foz de Estrechura, un desfiladero de infarto que atesora varias cuevas con pinturas rupestres de la Edad del Bronce, destacando Cueva Huerta, y más arriba la visita al pueblo de Parmu, tan paisajístico.
Algo más arriba se hacen dueñas del paisaje enormes bosques de hayas, y también aparece la lluvia. Será intermitente y sin apretar, dándole al avance un sentido épico.
Cuando por fin coronamos estallamos de alegría. La lluvia hace un parón, permitiéndonos echar al buche los bocatas y tirar unas cuantas fotos del lado leonés y del astur. PURA MAGIA!!!
Justo en el collado nace a izquierdas una pista ganadera que nos devolverá a Bárzana. Unos primeros kms donde mantenemos la altitud sobre los 1600m+, praderas llenas de caballos con vistas formidables, y más adelante nos precipitamos perdiendo altura rápidamente. Siempre el piso magnífico, con tramos alquitranados y de normal pista de ripio muy bien sentada. Eso sí, los desniveles de aúpa!! Rodeados de hayas y con paisajes de ensueño llegamos al bello pueblo de Ricao, donde tomamos la comarcal en bajada hasta Santa Marina. Aquí hay un puente antiguo y tras él entramos en un túnel minero para enlazar con la Senda del Oso, que tras unos kms hipnotizados nos devuelve al punto de partida.
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