jueves, 21 de marzo de 2013

ELS PORTS// diario de viaje

VIAJE A ELS PORS. HORTA DE SANT JOAN. 15-19/MAR/13
Día uno. 
La llegada nocturna no nos permite reconocer la zona. El impacto a la mañana siguiente es total. La zona de acampada Els Ateus es una zona amplia preparada con árboles de sombra (en esta época pelados) y una caseta de duchas y aseos y otra para hacer fuego. No hay ni Diossss. Un cartel indica que Sandra, el encargado, vendrá a cobrar je je (estuvimos 4 noches esperándola;))
Al poco, desayunamos y nos ponemos en marcha. El plan, unir dos rutas senderistas: la cova de Picasso y Els Estrets. 
Enseguida llegamos a La Franqueta, y tras unas vacilaciones, damos con el camino que nos aproxima a la cova de Picasso. Pronto entramos en un estupendo bosque, y tras un rato de pateada llegamos a la ansiada cova.  Bastante decepcionante, se trata de un pequeño abrigo, donde Picasso y su amigo del poble, Pallarés, se hicieron fuertes durante un verano en su adolescencia. Continuamos camino, caemos al río, y más allá a una antigua explotación de mármol rosa, y más allá, y tras subir un escarpe, llegamos al Más de Quiquet, y también al Más de Toni. Ya de regreso a La Franqueta, enlazamos con la senda que, pegada al río Estrets nos ha de llevar a un impresionante desfiladero. La caminata es larga. Comemos al lado de un salto de agua. Cruzamos el río y entramos en el desfiladero. Sin duda, una joya de la naturaleza. Caminamos impactados por la grandeza del lugar. Vemos cabras montesas y buitres. Lo recorremos enterito, y tras una micro siesta y después de haber entrado a un abrigo en la roca, deshacemos la senda de vuelta a Els Ateus. Los 15 kms y las casi 7 horas de caminata nos saben a gloria. Primer día aprobado con nota. Hace frío, recogemos leña y nos hacemos fuertes en la caseta de barbacoas. La cerveza, el vino, la potente hoguera, y al poco llega un pequeño coche con 4 machotes. Resultan ser valencianos, deportistas dedicados al menester de bajar barrancos enfundados en trajes de neopreno (hay gente para todo!!). Muy simpáticos, compartimos mapas, sacacorchos, hoguera, y sana conversación. 
















Día dos. 
He dormido de un tirón. Despierto con la primera luz del día. Al poco suena el despertador. Lo apago rápido y me incorporo. No llueve, de forma que pongo en marcha el plan A: escapada express BTT. Ya vestido de romano, tres galletas y una onza de chocolate en el cuerpo, una fotito, y en marcha. 
Al poco en la Franqueta, tomo una pista ancha que sube y sube. Tres collados y casi 8kms de ascensión hasta llegar al comienzo de una trialera. Entro en ella. Será una auténtica tortura. Se trata de un embudo con una pendiente vertiginosa, repleta de piedras, agua, y lo mejor, cientos de pinos caídos, rotos de cuajo por la acción del peso de la nieve , que hacen casi imposible el avance. Serán casi 2 kms auténticamente duros. Cuando a lo lejos diviso el Más de Pau, se dibuja una sonrisa en mi petrea cara. Sin embargo, las trampas no han hecho más que empezar. Por lo pronto, para llegar a él he de cruzar el crecido río Arnes. Es un brazo de agua tremendo. Tras salvar el estado de shock, encaramado entre piedras y con la ayuda de la bici, logro pasar al otro lado. Subidón de alegría, unas fotos y tomo una pista ancha bien chula. Pienso que si es así hasta el pueblo de Arnes, recuperaré el tiempo perdido en la trialera imposible. Sin embargo, no han pasado ni cien metros y ante mi de nuevo el imponente río. Vadearlo cuesta lo suyo pero consigo pasarlo. Y al poco de nuevo la misma. Esta vez no hay piedras ni na de na!! Asumo lo que hay y cruzo el río tan ricamente con el agua por las rodillas. Así será unas diez o doce veces más. El agua no parece tan fría, si bien siento los dedos de los pies congelados. Llego al Toll del Vidre, un espectacular salto de agua. Más allá, tras un descenso, cruzo nuevamente el río y sigo la pista en ascensión. Veo que he salido del track. Debería regresar y entrar en el río. Esto significa más agua. Compruebo el mapa en el GPS y decido seguir por la pista. Buena decisión. El camino forestal me lleva a Arnes, y algo antes de entrar en el pueblo carteles indicando el camino a Els Estrets. Estoy salvado. Llueve tenuemente. Tras caer de nuevo en el track, decido seguirlo. De nuevo aventura. Otro peligroso cruce de río, y por fin entro en Els Estrets. Tan majestuoso. El día más gris no puede ser. Ya lo recorrí ayer con la tropa. Esta fría mañana solo. A toda leche. Alguna foto, claro, con la bici y de romano. Han sido 3h 30', 28kms, 800m+: BTT express. 
Ya en Els Ateus, la tropa de tranqui, rápido me ducho, visto, preparo las bicis en la Cali y salimos cortando para el pueblo de Horta de Sant Joan. 
Pueblo antiguo y monumental, visitamos también el Museo Picasso. Comemos en un bar de la plaza y ponemos rumbo a Les Roques de Benet. Dejamos las furgos en la base y comenzamos a andar por pista ancha. La mole impresiona, cada vez más cerca. No vemos la senda de subida a Les Roques y continuamos por la pista. Un segundo desvío si lo cogemos. Nos damos cuenta del error cometido, pero ya es demasiado tarde. Caminamos hasta un collado. Nos cae la niebla. En la bajada, decidimos hacer la ruta circular. Al poco, la pista se convierte en senda. Ayudados por el GPS, nos adentramos en un estupendo bosque. La senda de bajada chulísima. Disfrutamos un montón. Fotos y más fotos. La luz cada vez más escasa. Cruzamos un arroyo y al poco llegamos a los coches. 5'5 kms, 370m+. Una estupenda caminata.
Llegamos a Els Ateus de noche. Preparamos la hoguera y cenamos. Ha sido un día tremendo. Lleno de aventuras en la montaña. Bien temprano con la bici solo. Y acabando el día medio perdidos con toda la tropa. No son las diez y las peques ya duermen arriba. Llueve. La Jose aún en la hoguera con la familia VP. Yo aprovecho para ordenar este texto, estupenda referencia para hacer crecer el blog. 












Día tres. 
Intuyo el amanecer. Pero hoy toca descansar. Me doy la vuelta y sigo durmiendo. Durmiendo? Bueno, ahora toca una de sueños incómodos, extraños, de esos que te vas despertando e intentas cazarlos, recordarlos....poder contarlos luego, cuando te levantes, aunque para entonces ya no merezcan la pena, o no tengan ningún sentido, o te estés inventando la mitad....o más.... 
Que a gusto, dejar que las mujeres se despierten a su aire, sin prisas, yo el último....
Hoy, verano azul. Nos espera la Vía Verda de la Terra Alta. De Horta de Sant Joan a El Pinell de Brai, y aún más allá, ya en tierras del Baix Ebre. Cuando a eso del medio día llegamos a la antigua estación de trenes de Horta, el viento y el frío nos hacen pensar en lo estrambótico del atrevimiento. Pero nadie comenta nada. Descabalgamos las bicis de las furgos, nos arropamos con todo lo que tenemos y nos ponemos en marcha. El viento en la espalda y la ligera pendiente hacia abajo....avanzamos sin dar pedales, que gusto!!  Sucesión de túneles, todos iluminados, afuera el sol, y los estupendos paisajes de la Terra Alta, con sus escarpes, bañados por el omnipresente Riu Canaletes. Bot, Prat del Comte, Pinell de Brai...., de últimas, tras haber recorrido unos 20 kms, decidimos dar la vuelta. Destino, el Monasteri de la Fontcalda. El sitio es magnífico. Nos da la bienvenida, sobre el puente, un ciervo. Mas allá su familia. El río se enreda entre unas paredes de vértigo, comemos, sesteamos, paseamos arriba y abajo, nos bañamos las piernas en las aguas calientes de la Fontcalda....
Ya de vuelta, toda la tropa se porta estupendamente, y aunque ahora si toca pedalear, el viento ha caído, y los magníficos paisajes y las cosas de los peques hacen que el paseo sea realmente agradable. Llegamos al punto de partida casi anocheciendo. Cargamos y ponemos rumbo al Monasteri de Sant Salvador, donde hoy se celebraba una romería. Tanto el monasterio como los alrededores nos dejan impactados. Lástima que sea tan tarde. Ya noche cerrada. 
De regreso a Els Ateus, comprobamos incrédulos que han llegado tres autocaravanas brrrrrr Nos han birlado nuestro sitio para hacer la hoguera y cenar. Toca improvisar entre los vehículos. Y de que manera!!!  Nada nos para. Arroz, huevos, carne, fruta. Menuda bacanal!!  Ya cenados, entre chistes de los peques y partidita de cartas, Moisés dando cabezadas, y el zorro dando cuenta de la bolsa de basura que hemos olvidado afuera....






















Día cuatro. 
6:30 de la mañana. Escarcha. Garmin reza -2°. Una cuajada y ya estoy sobre la cabra. No tengo claro el track. Cuando llego a La Franqueta decido pasar de él y tiro por la pista que va a la Cova de Picasso. Más allá, un cartel indica Barranc de Vall de Uixó. La pista sube y sube. El frío, intenso. Un collado y entro en una cerrada espectacular. Abajo se ve como una balsa enorme. Hacia allí me dirijo. Un barranco imposible aguas abajo. El camino se pierde. La única salida volver sobre mis rodadas. De vuelta en La Franqueta, tras dos horitas de paseo en vertical, los pies helados, decido regresar a Els Ateus. La misma escarcha. 
Con el sol ya alto, la mañana espléndida, desayunamos afuera, entre las furgos. Todo un regalo. 
Rumbo a Miravet, paramos en El Pinell de Brai. Compramos vino de la Terra Alta. Paseito y seguimos la marcha. Ya en Miravet subimos al castillo y comemos en el Molí del Xim. Buenísimo y baratísimo. El paso del río Ebro en barca no lo pueden hacer la familia VP con su autocaravana. Esto huele a despedida. Restan unos kilómetros a Tortosa y ....algunos más de autopista a casa.

















pincha aquí para ver track SEND/ cova Picasso+Els Estrets d´Arnes
pincha aquí para ver track BTT/ Els Estrets d´Arnes
pincha aquí para ver track SEND/ Roques de Benet
pincha aquí para ver track BTT/ Via Verda Terra Alta
pincha aquí para ver track BTT/ Els Ateus-Vall de Uixó

domingo, 10 de marzo de 2013

BTT/ Serra Serrella


Después de algunas dudas sobre la idoneidad de afrontar esta ruta, decidimos liarnos la manta a la cabeza y poner rumbo al Pantano de Guadalest. Sabemos que las dificultades van a ser muchas y dolorosas, vamos, lo de siempre ultimamante je je, pero esta vez con el añadido de que la informacfión que tenemos es una información erronea y  sesgada, sobre todo en lo referente a la ciclabilidad de la ruta...
Qué delicia siempre el comenzar a rodar. La mañana fresca.  Ganamos el pueblo de El Abdet, y de ahí, entramos en el desconocido, mítico, Barranco del río de Beniardá. Una delicia para los sentidos. También muy duro, siempre hacia arriba, hemos de sortear el río en incontables ocasiones. Ya en la parte alta, ganamos un collado, y aun subiendo, caemos por una trialera de vértigo....a una puerta de hierro!!, donde nos espera el dueño de la finca para echarnos la bronca brrrrr. Todo pinta de pena, pero poco a poco la conversación se va suavizando, y a poco acabamos compartiendo paella y vino je je.

Pequeño tramo de carretera y nuevamente a subir. Ascendemos a un impresionante collado con sus vistas majestuosas de la Aitana y a lo lejos Bernia. Seguimos subiendo, pero hemos cambiado el rumbo. Ahora vamos hacia levante. Siempre subiendo. Nuevo collado, y a la caída, refugiados del lastimoso viento y ante unas vistas sin par, hacemos la que sería única parada para reponer fuerzas. Aún no éramos conscientes de lo que nos depararía el track...
Barranco del Río Beniardá















De nuevo en marcha, ganamos un collado, un cruce de caminos, y nuestra dirección, luego de una senda estupenda, cada vez mas complicada, hasta el inicio de un runar. Lo cruzamos en ascensión y ganamos un nuevo collado. Muy penoso el recorrido, lo peor estaría por venir. A ese runar le sigue otro, y luego otro, y otro mas. Cada vez mas penosos y empinados. El cansancio de arrastrar la bici, hundidos en el pedregal...la moral tambaleándose. Sopla viento. Las nubes pasan sobre nosotros con total indiferencia. El tiempo se esfuma y nosotros no avanzamos... Nuevo collado. La cámara de fotos echa chispas del espectáculo visual. Sobre nuestras cabezas, la imponente mole del Pla de la Casa. Precipicios por todas partes. La única salida, seguir el track. Caminamos sobre rocas clavadas en punta, con las deportivas con las calas... Otra vez hacia arriba, otra vez otro runar. El paso de ladera de la montaña, sorteando piedras y matas, casi en vertical...trepando, temiendo por las bicis y por nosotros mismos, azotados por el viento. Por fin coronamos.


Encogidos por la majestuosidad de las lunáticas vistas, seguimos la única dirección posible: la cuerda sobre la montaña. Podemos montar las bicis. El subidón es indescriptible. Las dos laderas caen a cuchillo a nuestros costados. Detrás, la mole del Pla de la Casa, enfrente, toda Serrella, el Castellet, Aixortá, Bernia....al fondo las islas Pitiusas.... A tramos caminamos, y por fin damos con el vértice geodésico de Serra Serrella. 1351 metros. 
Tras un mínimo descanso, orientamos nuestras bicis en busca del track. Bajamos hasta la cabecera de La Canal. El lugar es sencillamente maravilloso. Cotejamos la posibilidad de abandonar el track e intentar ganar el Castellet entrando por La Canal. Finalmente decidimos seguir el track, en la creencia que el descenso era ciclable... Bajamos al collado de La Canal, donde tomamos dirección oeste, como regresando, en busca de la Mallá del Llop, que nos llevará a Famorca.


En una envalentonada, doy con mis huesos en el suelo, mas allá de una enorme roca donde ha quedado anclada mi bici, sobre unos mulliditos cojines de monja. El susto y algún arañazo. Duelen mas los de la bici que los míos. Todas las precauciones son pocas. Nuevamente toca subir. Y de nuevo para abajo. Por fin entramos en la Mallá del Llop. Barro y mas barro. Mucha agua. Y enseguida, pie a tierra. Ciclable??? MENTIRA. Imposible montar. Un desfiladero en vertical. El pueblo allá abajo, mas allá del infierno. Lo tomamos con muuuuucha filosofía, y poco a poco vamos perdiendo altura. 
Llegamos al pueblo mientras repican las campanas de la iglesia. Son las 5 de la tarde!!! Deshidratados y con calambres, y apenas hemos cubierto la mitad de la ruta!!!
Amenaza lluvia. Casi sin quererlo, dejamos el track y caemos a la carretera. Nos miramos y decidimos obviar las sendas, que seguro que están de agua hasta arriba, una nueva ratonera. Así, casi en una volada hacemos por carretera los 7 kms que separan Famorca de Castell de Castells. Ya estamos en la pista que sube al collado del Castellet. Unos 4 durísimos kms en ascensión. Eufóricos por ver que estamos salvando los "muebles". Ya en la cara del valle de Guadalest asistimos a las sobrecogedoras vistas del atardecer entre unos nubarrones que sin duda están descargando en la Aitana. Damos aire a la pinchada rueda de Javi y empiezan a caernos gotarrones como puños. Frenamos el vertiginoso descenso. Está claro que llegaremos calados, pero no podemos caer. Después de 10 horas con la bici a cuestas, yendo a su lado, e incluso alguna vez sobre ella, no podemos caer.
La Canal. Al fondo, el Castellet, Aixortá y Bernia. A la izda., las Pitiusas.
El Castellet de Castell de Castells



http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=4095238